viernes, 13 de agosto de 2010

Pies Vs. Naranjas

    No entiendo lo de las medias naranjas. ¿No podríamos haber encontrado un símil más auténtico, activo y humano que el de este cítrico exquisito que en ningún caso debiera menospreciar?
      Hace ya tiempo, rodeado de mucha gente joven, desarrollé una teoría a la que denominé "tu otro pie". Porque ¿quién va por ahí besando o lamiendo pies a los demás? Nadie. No toleramos los pies de otro en absoluto. Sin embargo, sólo hay un caso en el que todo cambia y se convierte en un festín de extrema belleza y en un baile romántico y sensual. Hablo del Amor. Cuando llega y se queda, no hay obstáculos ni fronteras y los muros que puedan existir se derriban aceleradamente.

          Tu mano agarra su pierna, la deslizas muy lentamente navegando por su piel y aquel gemelo se derrite dando paso a su tobillo, punto de partida y equilibrio de su pie, cuyos dedos juegan a escaparse de tu pasión y en ningún caso logran... Con luz de velas perfumadas, agarras fuertemente de nuevo su pierna y dejando que su rodilla ceda levemente, acercas su empeine hacia tu boca...

          De ese modo encuentras tu otro pie, aquél que nunca tuviste pero al que siempre juraste servidumbre y fidelidad. Un pie que no es como el de los demás y que no da bascas, sino placer, serenidad y se muestra delicado, sobradamente dispuesto ante tus dientes.  

        Amor, ese bendito veneno que convierte la locura en lucidez.

5 comentarios:

  1. Ooooh... Maestro Solana en plenitud. Parece que nos hemos puesto de acuerdo hoy para escribir ¿no? Al menos las temáticas son bastante contrapuestas. Sublime definición del recorrido Pon, me ha encantado. Un abrazo desde el desvencijado sofá rojo del salón de tu todavía(siempre)casa.

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  2. jeje, fantástica teoría! No sé qué enrevesado placer se oculta en contar a los niños pequeños los falsos teoremas y cuentos sobre el amor. ¡Verdades como ésta deberían ser las que traspasaran generaciones!
    Quizá la Cenicienta con su zapatito era la que menos desencaminada iba... :)

    Besitos!

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  3. Joer, Miguel, y ahora me doy cuenta de tu entrada unos días antes de esta mía, con una foto muy parecida... Hay cosas q no se pierden nunca. Abrazos, compañero.

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  4. es verdad!!q bonita teoria, a mi hay unos pies q me encantan, y tu sabes de sobra lo feos q son!!!

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  5. jejejjee, q bonita teoria, a mi hay unos pies q me encantan y tu sabes de sobra lo feos q son!!eso es amor?

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